Floodar e Email Marketing: cuando menos es más

Publicado el 27 de diciembre de 2012

Llega el final de año y con él, los emails de final de año. ¿Sabe cuando alguien tiene el inconveniente de quedarse tuiteando y actualizando Facebook hasta la repetición y termina dominando el Timeline? Lo mismo ocurre con aquellas personas que mandan dos, tres, cuatro, diez emails al día para amigos y compañeros y llenando su bandeja de entrada. Ese acto inconveniente es llamado informalmente el “ floodar ", palabra que viene de “flood" en inglés y que se traduce como “inundación”, es decir esas personas que causan una inundación virtual en su Timeline y en la Bandeja de Entrada. Ese fenómeno es increíblemente frecuente durante la época de las fiestas de final de año.
Y ¿qué ocurre cuando alguien queda "inundado" en  su Bandeja o en su Timeline de las redes sociales? No tardará mucho en clasificar esos emails como Spam (o como mínimo con "No importantes" en Gmail, por ejemplo) y bloquee u oculte esas actualizaciones en Twitter y Facebook.


¿Cuál es la lección para el contexto del email marketing entonces? Intentar siempre buscar la medida correcta. Puede ser una época especial y ciertamente tiene mucho que compartir con sus contactos durante este periodo, pero de nada sirve insistir en una campaña de email marketing y reenviarla dos, tres o cuatro veces a los mismos contactos en días consecutivos (como viene siendo común. Ese tipo de insistencia, en vez de generar conversiones de última hora, puede acarrear en desuscripciones o en otras interacciones negativas.


Reenviar una campaña de email marketing no es algo erróneo por sí sólo. Por el contrario, a veces es lo menos aconsejado a hacer. Si debe ser hecho, debe hacerse con mucha parsimonia, o si corre el riesgo de inundar la bandeja de sus contactos. Una idea, por ejemplo, es no enviar exactamente la misma campaña: como mínimo de los mínimos intente cambiar el asunto.


Otra idea es crear un filtro a partir de las personas que ya interactuaron con esa campaña de email marketing, es decir, enviar solamente a quien no abrió o clicó aún. De esa forma garantiza que no va a ser repetitivo o inconveniente con quien ya prestó atención a su mensaje.