Una película de terror puede acontecer de diversas formas para el profesional que trabaja diariamente con el email marketing, generalmente ocurre en forma de emails no solicitados y con políticas de bajas complejas. La vida como profesional de email marketing nos enseña mucho y también cambian algunas de nuestras actitudes en el día a día en relación a la etiqueta de comunicación electrónica, sea vía email o a través de redes sociales. La tolerancia para el email marketing no solicitado cae a cero tanto en la vida profesional como personal.

Al final si pasamos el día divulgando las buenas prácticas del email marketing y educando a las personas a no enviar spam, ¿cómo podemos llegar a casa y tener en la bandeja de entrada emails sin tener ningún tipo de relación? Acompáñenos más abajo con la historia de terror de un profesional del email marketing.

Imagine la siguiente situación: recibe un email de una empresa promocionando oportunidades y ofertas en su cuenta de email personal. En realidad no se acuerda de de haberse dado de alta para recibir tal información pero ante el beneficio de la duda, ya que no confía mucho en su memoria e imagina que esa empresa de renombre no podría haberse apropiado de su contacto de forma indebida.

Ya que es conocedor de las buenas prácticas de email marketing y de los mecanismos de envío, opta por no clasificar el email como spam directamente en su proveedor, pues eso equivale a una denuncia y puede perjudicar la reputación del IP que envió el email. Procede entonces a darse de baja que le ofrecen al final del email.

Imagine entonces la sorpresa al ser direccionado a una página que comunica que para darse de baja necesita informar de su CPF y su email. Después de esto pasarán 7 días para que se confirme la baja.

Alguien que trabaja todos los días con email marketing solo puede reaccionar de una manera ante esta situación: con furia y rabia. Esa situación infeliz no es ficticia. Pasada la rabia queda la incredulidad ante ese tipo de acción.

¿Qué podemos aprender? Que el darse de baja tiene que ser inmediato y fácilmente accesible para el contacto. Por esa razón mantenemos la opción de opt-out en la parte de debajo de todos los emails que salen de nuestro sistema de email marketing. También por esa razón exigimos que la baja sea hecha por el sistema y no por vía email.

La baja por emailmanager es automática y 100% seguro (vea más sobre eso en el post “Buenas prácticas de Email Marketing: la forma de desuscripción dice mucho sobre ti”). Ahora que su contacto no recibirá más ningún correo no deseado, su deseo será respetado. El momento del opt-out no necesita de la rabia ni la furia si se hace de manera respetuosa.