¿Cuándo es el mejor momento de apelar hacia el lado más emocional de una campaña de e-mail marketing? ¿Cuándo es momento de ser un poco más distante? ¿Cuál es la diferencia entre ser apelativo y emotivo? Los síntomas de las emociones humanas no siempre son tan transparentes como queremos en una campaña de e-mail marketing, y justamente por eso es preciso tener cuidado.

Trabajar emociones en una campaña de email marketing no es erróneo. El problema es cuando las personas quieren forzar una emoción. Una campaña puede ser conmovedora pero difícilmente  será que “ser conmovedor" sea su principal objetivo. La línea entre conmovedora y apelativo puede ser bastante tenue y no hay una fórmula específica para seguir. Normalmente se recomienda el buen sentido, pero cosas como el buen sentido son bastante subjetivas, por tanto, no cuesta nada, dar algunas ideas.

Algunas fechas son naturalmente más emotivas que otras. Un ejemplo simple: por más que la mayor parte de los brasileños sea adepto al Carnaval, es indiscutible que la Navidad, en comparación, traiga mucho más emociones. Eso es algo previsible, la Navidad es una fecha emotiva. Pero está también la subjetividad en el otro lado de la ecuación: del lado del contacto, un factor mucho más difícil de prever. Lo recomendado es dejar el contenido de la campaña de e-mail marketing hablar por sí mismo, no utilizar subterfugios para buscar conmover y no generalizar.

Otros eventos, como tragedias y desastres naturales, son conmovedores por razones obvias. Pero hay que tener mucho cuidado al abordar esos temas, ya que no va a querer parecer sensacionalista u oportunista. ¿Es adecuado mostrar simpatía por las víctimas de una tragedia en sus comunicaciones con contactos? En ciertos casos sí, va a depender del ámbito del acontecimiento y del perfil de su newsletter. A veces, puede contribuir divulgando informaciones pertinentes sobre cómo ayudar, por ejemplo.

Ante la duda, sea discreto. Tras una tragedia que sacudió el país entero como la de Santa María, ¿qué se puede decir? Sí, estamos todos de luto. Tal vez sólo sintetizar ese sentimiento baste en la mayoría de los casos. Google, por ejemplo, simplemente colocó una señal de luto en la capa. Sin flores. Sin apelación. Estamos todos de luto. Finalmente, ¿qué más se puede decir?